Cala Hernandez.
Nos encontramos nuevamente en un enclave abrupto y descarnado conformado por la Sierra de la Higuera. Desde cumbres con las del Cerro Ricardillo (309 m.) o desde el mismo Cerro Negro, descienden fuertes vertientes hasta adentrarse en las profundidades marinas.
Este hecho provoca la aparición de numerosos acantilados que esconden unas pocas calas de acceso prácticamente imposible.Una de estas calas es precisamente Cala Hernandez.
Esta cala se encuentra en el sendero que va desde Las Negras a la Cala de San Pedro y desde éste se puede acceder a la misma. Sin embargo, se desaconseja el acceso por tierra. Si queremos disfrutar sin peligro del entorno podemos hacerlo por mar, en barco o en los kayacs que podemos alquilar en la misma playa de Las Negras. También podemos bucear y ver los maravillosos fondos marinos. Dentro de la fauna autóctona destacan los meros, las morenas y los pulpos. Las praderas de posidonias (Posidonia oceanica), cada vez más escasas, dan cobijo también a especies más pequeñas y algunas más raras como las nacras.
Cala San Pedro.
Cala San Pedro siempre fué una recóndita cala de gran belleza pero de acceso difícil, pues había que caminar un largo trecho, en el que aún se disfruta de la grandiosidad y rudeza de este territorio. Si bien ya no es tan tranquila y recóndita pues el acceso que antes era un largo paseo desde Las Negras, hoy se puede hacer en barca, que constantemente transporta gente desde las Negras a esta Cala.
Presenta unas condiciones ambientales excelentes, es de aguas tranquilas y posee unos fondos marinos de gran interés para los submarinistas. En la cala existe un manantial de agua dulce y una defensa costera del XVIII. La cala está permanentemente habitada por una comunidad de personas amantes de la naturaleza, la práctica del nudismo y los lugares solitarios, si bien en Semana santa y Agosto es un destino de gente jóven que hace acampada libre, por lo que la paz y el sosiego se transforma en camping sin servicios y marchita juvenil.
Cala Montoya.
El tramo costero comprendido entre la dorsal rocosa de la Rellana de San Pedro(una meseta a 250 metros de Altura) y los acantilados del Plomo presentan un relieve de gran irregularidad paisajística, dominada por agrestes relieves volcánicos y sedimentarios que se acercan al mar en forma de elevados acantilados. Este hecho provoca la aparición de numerosos acantilados que esconden la calas Montoya, Chumba y Puente.
Cala Chumba.
Esta Cala al igual que Cala Montoya y Cala Puente es inaccesible por tierra..solo se puede aceder a ellas por Mar y esconden una intrinsica belleza virgen,holladas muy pocas veces por la huella del hombre.
Cala Puente.
Cala Puente es un lugar paradisíaco, una cala sin acceso por tierra, tan oculta entre los agrestes acantilados de la zona que va desde Cala San Pedro a Cala del Plomo, que es posible pasar a poca distancia y no distinguirla. Es excelente, con el agua de un color imposible de describir que va de un azul intenso a un celeste verdoso, con tal transparencia que se pueden distinguir sin problema las colonias de posidoneas y las piedras del fondo del mar.
Como vimos las calas de este reportaje son todas de dificil o imposible acceso por tierra..solo por mar se pueden ver estas maravillas de la naturaleza.
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